La Reflexología Podal es una terapia manual basada en la existencia de zonas reflejas en los pies que representan a todos los órganos y partes del cuerpo, los cuales pueden tratarse a distancia mediante la presión o el masaje de estos puntos.
Mediante la Reflexología, se actúa sobre el conjunto de los sistemas orgánicos, circulación sanguinea, sistema linfático, endocrino, neurológico y osteoarticular a fin de tratar a distancia el órgano enfermo.
La Reflexología ayuda a prevenir, al activar nuetro sistema de defensas, evitando así en muchos casos la aparición de la enfermedad.
Mejora al activarla todas nuestras funciones vitales.
Ayuda a encontrar equilibrio y bienestar.
Tiene un gran valor tanto en la prevención como en el diagnóstico y el tratamiento de las patologías, cualquiera que sean sus causas y manifestaciones.
El papel preventivo que cumple, se explica porque equilibra la energía del organismo y por lo tanto contribuye a mantener un estado de salud favorable.